CICLO: Fragments d’une filmographie impossible

Con este título tan evocador -del que me apropio para este blog desde ya- se organizó en la Cinematheque Française de París el ciclo más completo sobre el cine de Jess Franco visto hasta ahora. 65 películas pasaron por las salas Henri Langlois y Georges Franju durante el mes de junio y julio de 2008, repasando a fondo y con bastante buen criterio las etapas y estilos del director. Podéis encontrar información sobre el ciclo aquí.

Entrada de la Cinematheque, obra de Frank O. Ghery (1992).

La única etapa que pasó desapercibida fue la de la productora Golden Films de los 80, probablemente por las pocas facilidades que suele poner Emilio Larraga, capo de la Golden Films, para este tipo de cosas. Una verdadera pena.

Las modernas salas del recinto exhibían normalmente dos títulos al día, alrededor de las 19,00 y las 21,00h y la afluencia de público era bastante importante, unas 50 personas como mínimo por sesión. A diferencia de España en este tipo de eventos, en París la edad media del público era de unos 40 años, hombres en su mayoría y con aspecto de cinéfilos de filmoteca. La mayoría repetían a diario, incluyendo una curiosa anciana de pelo largo canoso y muletas que no se perdía ni un pase. La audiencia respondía con respeto, pero también con mucho sentido del humor, a las bromas (voluntarias o no) de las películas, a los anacronismos, los errores, y a la aparición de actores de culto como Howard Vernon. Y a la salida se oía comentar las películas con verdadera devoción por los alrededores del parque de Bercy.

Las películas se exhibían en 35mm (salvo las rodadas en video) y las copias variaban en calidad, pero la mayoría dejaban notar el paso del tiempo. Si el idioma original no era francés, o no las copias no estaban subtítuladas, se utilizaba subtitulado electrónico en francés. El sonido igualmente variaba según la película, pero no era especialmente bueno. Todo ello me hizo pensar en muchas ocasiones que actualmente la mejor forma de ver las películas de Jess Franco es en formato DVD y en ediciones como las que nos ofrecen Blue Underground o Severin Films, que superan sobradamente la visión de una copia en cine original, no sólo en sonido y limpieza, sino más importante, en una paleta de colores que este celuloide caduco ya no puede ofrecer. Eso sí, el placer nostálgico de ver en pantalla panorámica una película del tío Jess es algo único, por otra parte.

También se convierte en una experiencia insustituible el visionado de sus últimos títulos rodados en video y repletos de secuencias larguísimas ralentizadas en las que no es posible usar el mando a distancia. Tal fue el caso del estreno mundial de LA CRIPTA DE LAS MUJERES MALDITAS (2007) de 2 horas y media de duración. Alguna vez Jess Franco ha subrayado las virtudes del cine en casa y del mando a distancia, por lo que entiendo que en estos casos la proyección en sala de cine no es lo ideal.

De todas formas, este ciclo ha servido como empuje definitivo para la creación de este blog, conocer algunos títulos extraños y pasar casi una semana sumergido en el universo franquiano, experiencia que continúa añadiendo niveles de conocimiento a los ya adquiridos durante unos cuantos años de fanatismo. Así que bravo por la Cinematheque Française y a ver si otras más cercanas toman nota…